Al entrar en el bosque de Villecartier, un magnífico bosque de hayas y robles con maleza de acebos, se ingresa en un antiguo bosque real de 1000 ha, un remanente del bosque original que cubría la Armórica.
El bosque de Villecartier, lado de la naturaleza…
El bosque de Villecartier ha sido testigo de la historia de la humanidad: los invasores normandos se atrincheraron allí en el siglo X. Los chuanes y republicanos se enfrentaron allí durante la Guerra de la Vendée…
Antiguamente, el bosque acogía a toda una población de carboneros, fabricantes de zuecos, leñadores, aserradores. En los siglos XVIII y XIX se fabricaron miles de carretillas para la reparación de los diques de los pantanos de Dol y así como para las obras de profundización del lecho de la Vilaine. Los carboneros también vendían las cenizas como polvo para lavar o como fertilizante para los granjeros. Un gran número de fabricantes de zuecos vivían en chozas construidas con madera y cubiertas con ramas llamadas logias. Después de la Primera Guerra Mundial, la mayoría abandonó el bosque para instalarse en pueblos vecinos como fabricantes de zuecos.
Poco antes del Desembarco de Normandía en 1944, los madereros fueron requisados para que talasen muchos árboles con el fin de plantar grandes estacas en la bahía del Monte Saint Michel, mejor conocidos con el nombre de espárragos de Rommel, que contribuyeron al fortalecimiento del Muro del Atlántico.
El sendero de los pequeños monumentos
Hoy en día, el bosque ha recuperado la calma y se ha convertido en un espacio dedicado a la recreación y los amantes de la naturaleza.
Saliendo del centro de ocio, se inicia un circuito de 9,5 km por pistas 100% forestales. Siguiendo los senderos descubrirá las riquezas naturales, paisajísticas y patrimoniales que allí se esconden: estanque del bosque, caos rocoso cubierto de musgo, valles profundos… Árboles notables, oratorio, cruces y otros pequeños monumentos se revelan y cuentan la historia milenaria del bosque de Villecartier.
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El puerto en miniatura
Los padres y los niños pueden declararse navegantes para dar un paseo por el estanque en un bote eléctrico.
Suba a bordo de un ferry, un arrastrero, un vapor del Mississippi, un remolcador, un Queen Mary II o un barco ligero. (2 a 4 asientos dependiendo del modelo). Sobre el agua admirará la flora y fauna del bosque…
Abierto de abril a septiembre (fines de semana y festivos) y todos los días de julio a agosto.
+33 (0)6 40 79 96 04 y +33(0)2 23 15 02 18
www.couesnon-marchesdebretagne.fr
Parque de los Grands Chênes
Bosque de Villecartier
Venga y diviértase en un parque acrobático de hasta 30 m de altura, con más de 210 talleres para grandes y chicos: 2300m de tirolinas, grandes lianas, un cañón, parque para niños. Póngase a prueba con el Quick Jump, ¡un salto de caída libre!
2 rutas: el parque de adultos (4h30 – a partir de 10 años) y el parque infantil (2h – 5 a 10 años y más de 1,10 m)
Abierto desde finales de marzo a junio los fines de semana, vacaciones escolares y festivos, y todos los días de julio a agosto. Consulte los horarios y días de apertura en
www.les-bretons-perches.bzh
El paseo por la naturaleza «Descubramos el bosque»
Descubra el bosque de Villecartier en compañía de Pascal, un animador apasionado por su región. Le contará la historia de este bosque milenario, la vida de los seres que lo habitan, así como las leyendas que se le atribuyen.
Domingos animados
Eventos, mercados, espectáculos, paseos… y muchas sorpresas marcan el centro de ocio un domingo al mes de abril a septiembre. Estos días de festividades para grandes y pequeños son gratuitos.
Todo el programa en www.tourisme-marchesdebretagne.com
Para cualquier duda contacte
La Ofinica de turismo Couesnon Marches de Bretagne
+33 (0)2 99 97 40 94 – +33 (0)2 99 97 85 44
www.tourisme-marchesdebretagne.com